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Un águila


 A mi padre


Posado en lo alto de la cumbre

un águila prepara su viaje.

Durante horas mira animal serio

la seriedad quieta del mar,

la majestuosa magnitud de agua.


Con semblante enjuto, de rasgos ancestrales

comienza el ascenso, dueño del primer aire

que bordea la altura de su estatura.

En la otra isla vive un hijo, un hombre que habla

con las almas de los árboles y animales:

un hombre calladamente callado, en silencio callado.



Toma el águila en sus brazos al hombre

y lo arropa en el calor de sus plumas.

Hermosa canción de arrorró

el corazón del hombre en las alas del águila.


Saca el sol del agua sus alas amarillas.

Comienza el avance de la luz.


Imagen: Airam Hernández López

Texto: Benita López Peñate ( del libro dedicado a mi padre "Libros de sal", Editorial Beginbook, 2010)


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